En varios países de Europa, ponerse un chaleco de seguridad para caminar por el acotamiento de una carretera o para descender de un vehículo sobre la misma, es una exigencia por ley.  Además, portar dicho chaleco es una medida de seguridad por lo que en México, aunque no esté escrito en la ley, es recomendable la utilización del mismo en casos como los mencionados al inicio del artículo.

Con un chaleco reflejante de buenos materiales, estamos dando a los conductores una distancia de hasta 150 metros para vernos y reaccionar en consecuencia, ya sea aminorando la velocidad o apartándose en caso de ser necesario. Con ello, el chaleco se convierte en un dispositivo de seguridad preventiva.

Sin embargo, como ocurre con cualquier otro dispositivo de seguridad, es necesario entender que del correcto uso del chaleco reflejante dependerá que éste nos proteja o de lo contrario, hasta nos exponga a un riesgo vial mucho mayor que el no llevarlo puesto.  Ello, aunado a no caer en un exceso de confianza al utilizarlo y estar siempre alerta a lo que sucede a nuestros alrededores al encontrarnos debajo del vehículo, incrementará nuestra seguridad.

Aunque en México no sea obligatorio por ley el uso del chaleco reflejante, te recomendamos portar siempre al menos una pieza de buena calidad dentro de tu vehículo, como parte esencial de tu kit para emergencias.